domingo, 25 de marzo de 2007

Gayatri Reflexión nº 21

La íntima vocación de la humanidad es la unión con Dios; esto lo proclaman todos los santos y místicos de las diversas religiones. Estos santos y místicos son llamados profetas porque recuerdan a cada alma su verdadera vocación y en lo posible, les muestran el camino hacia la luz. Los profetas creen con todo el corazón y con toda el alma que Dios ve aquí y ahora a toda alma, a todas las almas, a los seres y a las cosas. Ellos son llamados profetas, porque en sus ojos se puede descubrir la urgencia interior porque toda alma se transforme en una casa donde pueda habitar el Espíritu Supremo.